Evangelio viernes 13 de enero
Viernes 13 de enero de 2023 | Alejandra Castelblanco13 DE ENERO DEL 2023
Evangelio según San Marcos capítulo 2, 1 - 12
Viernes de la Primera Semana del Tiempo Ordinario
Jesús volvió a Cafarnaún y se difundió la noticia de que estaba en la casa. Se reunió tanta gente, que no había más lugar ni siquiera delante de la puerta, y él les anunciaba la Palabra. Le trajeron entonces a un paralítico, llevándolo entre cuatro hombres. Y como no podían acercarlo a él, a causa de la multitud, levantaron el techo sobre el lugar donde Jesús estaba, y haciendo un agujero descolgaron la camilla con el paralítico. Al ver la fe de esos hombres, Jesús dijo al paralítico: "Hijo, tus pecados te son perdonados". Unos escribas que estaban sentados allí pensaban en su interior: "¿Qué está diciendo este hombre? ¡Está blasfemando! ¿Quién puede perdonar los pecados, sino sólo Dios?" Jesús, advirtiendo en seguida que pensaban así, les dijo: "¿Qué están pensando? ¿Qué es más fácil, decir al paralítico: 'Tus pecados te son perdonados', o 'Levántate, toma tu camilla y camina'? Para que ustedes sepan que el Hijo del hombre tiene sobre la tierra el poder de perdonar los pecados -dijo al paralítico- yo te lo mando, levántate, toma tu camilla y vete a tu casa". El se levantó en seguida, tomó su camilla y salió a la vista de todos. La gente quedó asombrada y glorificaba a Dios, diciendo: "Nunca hemos visto nada igual".
Meditación de Alejandra Castelblanco de Prieto
"Nunca hemos visto nada igual"
Jesús parece decirnos: los milagros sin duda conmueven, hacen que la gente quede asombrada y a lo mejor puede traer consigo una conversión. Sin embargo, después de un tiempo, se olvidan o quedan como algo sorprendente a lo que se asistió. Mi invitación va más allá, es a dar un giro al corazón, que cada día sea un pequeño milagro de conversión para que sea duradero, que permanezca en el tiempo y mejor aún produzca el milagro de convertir a otros por medio del testimonio de vida. No se queden pegados en lo deslumbrante sino más bien, en el detalle que va produciendo un cambio interior.
Hace poco fue año nuevo, no hubo fuegos artificiales, era raro no tener que mirar el cielo o escuchar a lo lejos los estallidos que producen. Estábamos "obligados" a seguir mirándonos y a hacer más duradero el abrazo a cada uno, sin interrupciones. Fue lindo ver que esta vez lo deslumbrante es estar con el otro, mirarse, agradecer estar juntos. Vinieron mis papás y solo faltó uno de mis hijos, y no es que me importe mucho esta fiesta, pero rescato que es bueno y reconfortante partir un año nuevo rodeada de cariño, de buenos deseos y de la mejor compañía. Fue mi primer milagro 2023.
Querido Señor: hoy me invitas a agradecer, a fijar mi mirada en los detalles, en la delicadeza de los milagros pequeños que tantas veces pasan inadvertidos. Gracias por tu compañía, por tu consejo, por darme confianza, por regalarme ánimo y esperanza en un futuro mejor. Gracias por mi familia, por mis papás que están sanos, mis hermanas que me acompañan, mi marido y mis hijos que me llenan el corazón. Gracias por las personas que trabajan conmigo, mis alumnos, mis amigos. Infinitas gracias por todos esos "Milagros" que pones en mi camino.
AMÉN