México querido, México violento

Hace unos días recibí un correo, que tenía por titulo..."Nueva cultura vial en San Luis" y muy emocionada lo abrí. Es un vídeo donde van dos autos en una carretera, y el de atrás, quiere rebasar al de adelante,  y este saca por la ventanilla una metralleta. Por supuesto el carro de atrás, se frena y no lo rebasa.

Al principio me reí, pero después... me dio pena. Lo que veía... es real en mi país, no hay nada de ficción en este vídeo. Desafortunadamente en México, este tipo de acontecimientos, son más frecuentes y son... los menos violentos. Resulta que ahora nos respetamos, por miedo a que nos den un balazo, y no por lo que sabemos, o por lo que somos.

Me entristece ver, como el hombre le ha dado tanto poder a un arma letal. Eso quiere decir que no ha  aprendido nada de la vida, y no encuentra la manera de enfrentarse a ella, sin un arma. Tal vez no sea su culpa. En nuestro país y en otras partes del mundo, existe tanta pobreza, que los padres de estas criaturas, nunca se preocuparon por enseñarles, lo que es bueno y lo que es malo, solo se ocuparon de sobrevivir. No olvidando, como se desenvuelven las autoridades en cuestión de educación.

Pero que hay de nosotros, que nos asustamos ante tremendos acontecimientos ¿No somos de alguna manera, responsables de que esto suceda? Nosotros mismos, le hemos dado poder, no solo a un arma, le damos poder, a la indiferencia, a lo inmoral, a la ignorancia, a la mediocridad  y a tantas cosas, que lo único que hacen es debilitarnos como seres humanos. Sintiendo un tremendo vacio en nuestra vida,  y que desafortunadamente se refleja en nuestro entorno.  Me pregunto... ¿que es lo que quiere Dios de nosotros?

Por que no darle el poder... al amor, al conocimiento, a la buena voluntad y a todo aquello que nos da seguridad y confianza en nosotros mismos y en los demás. Cuantas veces un simple abrazo nos hace sentir bien, nos sentimos acompañados y sin miedo. Un buen libro nos da, la mejor de las armas...el conocimiento. Y no nos olvidemos de la buena voluntad, por que cuando damos lo mejor de nosotros, los más beneficiados, somos nosotros mismos.

¿Que me dicen de la oración? ¿Acaso no nos sentimos mejor después de una linda oración? Cuantas veces nos sentimos agobiados, por no encontrar solución a nuestros problemas, y al  estar a solas con Dios, nuestra mente comienza a fluir con ideas y con soluciones.

Estoy segura, de que todos hemos sentido una paz inexplicable, al encontrarnos con Dios. ¿Por qué no buscarlo más? ¿Qué nos detiene?... ¿la indiferencia? ¿La ignorancia? O ¿la flojera?  Intentemos día con día, estar un momento a solas con Él.

Creo que Dios quiere...que le demos poder a su palabra.

Por que no darle poder a la palabra de Dios