Nuevo santuario para la Mater en Quillota

El rey David, avergonzado de vivir en un palacio de cedro, mientras la casa de Dios era sólo una carpa, quería construirle una morada digna de Él.

La respuesta de Dios no se hizo esperar: "¿Me vas a edificar tú una casa para que yo habite?... Yahvé te anuncia que Yahvé te construirá una casa" (II S 7,5 y 11)
Dios señala donde quiere instalar un santuario, el lugar, la fecha, con los instrumentos que él escoge. Hemos escuchado esa palabra, los que anhelamos un santuario de la Mater en Quillota: Dios tiene una Alianza eterna con nuestra ciudad, queremos descubrirla, hacerla viva, explícita en esta hora de nuestro pueblo... ...

Pasó entre los primeros patriotas, vino con las primeras congregaciones: Mercedarios, Dominicos, Franciscanos, sirviendo en la Beatita Benavides, una laica que estuvo en el origen de todos los servicios a los más pobres de Quillota.
Suscitó en Schoenstatt señoras, jóvenes y matrimonios que anhelaron atraerla a servir a su Pueblo, en el Valle del Aconcagua, instalando su taller de acogida y transformación. Pasó en Mario Hiriart, quien estuvo en nuestra tierra tantas veces, apoyando a personas y grupos, especialmente a la Juventud.

La Mater se instaló en un santuario-hogar pequeño en el centro de la ciudad, santuario precursor de su venida a esta tierra, perteneciente a un miembro del Instituto de Nuestra Señora de Schoenstatt, donde celebramos tantos 18 renovando la Alianza primera.

Luego la Pequeña Familia plantó un monumento de roca en terrenos de la Ermita, en el límite entre La Cruz y Quillota, ya sugiriendo su acogida abierta a toda la ciudad. Llamó de nuevo, siempre fiel a señoras, juventudes, matrimonios y varones, encendiéndolos con su acogida en este lugar de gracias.

Este 18 de Marzo de 2011 nuestro obispo Monseñor Gonzalo Duarte confirmó su autorización para construir un santuario de la Madre Tres Veces Admirable de Schoenstatt en los terrenos de la Ermita, animándonos para que pueda ser bendecido el 19 de Noviembre de este año.

Nuestro santuario surge en un momento en que la Iglesia necesita una profunda renovación, nacida de su propio reconocimiento de debilidad. Nos mueve el anhelo que la gracia fecunde las fuerzas vivas de la Iglesia desde este Santuario, consagrado a la Madre constructora de la Iglesia que tanto la necesita.

Dios quiso que en este momento difícil de la Iglesia, el Schoenstatt chileno regalara un nuevo santuario de la Mater a nuestra Patria. Anhelamos que este sea obra de la colaboración de toda la Familia Nacional; lo necesitamos y hay quienes se han comprometido a que en Chile todo santuario sea un regalo de Dios, y de nuestra Familia del 31 de Mayo para ir derramando las gracias y la vida que permanentemente brota de nuestros Santuarios, en cada lugar.

En Quillota somos una familia pequeña, constituida por jóvenes, señoras, varones, matrimonios abiertos a colaborar en un servicio a la Juventud, a las familias y al fortalecimiento de la comunidad en nuestra diócesis. Ofrecemos un hermoso lugar de peregrinación, de gracias, escogido por Dios, donde las comunidades de Iglesia puedan: orar, ser acogidas, transformadas por el Espíritu Santo y devueltas a nuestras comunidades parroquiales a entregar un humilde aporte a esa Iglesia, soñada por el Padre, que queremos construir.

Invitamos a la familia de Schoenstatt chilena a sumarse efectivamente a esta bendición para Quillota y la Diócesis de Valparaíso, constituida en un tercer Santuario de la Mater, junto a los santuarios vecinos de Agua Santa y Los Pinos.

Hemos prometido 15 Millones de Avemarías, con el fin de atraer la gracia para esta gran Misión dentro de la Iglesia diocesana, queremos pedirles colaboración en esta campaña, en avemarías y en dinero que nos permita la construcción del Santuario. Cualquier consulta pueden hacerla a alejogonz@gmail.com, Alejandro González, Quillota.

Les bendice desde la Región de Valparaíso, Chile, la Familia de Quillota.

Alejandro González Guerrero
Abril de 2011