Padre Carlos Cox, Rector del Templo Votivo de Maipú: "La misión fundamental de los santuarios es la renovación de la Iglesia"

Así como México tiene a la Virgen de Guadalupe como patrona, en Chile ese lugar es ocupado por la Virgen del Carmen, quien este jueves 16 celebró su día en el Templo Votivo de Maipú, santuario nacional administrado por el Padre Carlos Cox, sacerdote schoenstattiano.

La historia de amor entre nuestro país y la Virgen comenzó durante la época de la conquista española, con la llegada de los monjes Agustinos en 1595. Fueron ellos quienes la dieron a conocer, fundando las primeras cofradías y conventos. Con el correr del tiempo, en medio del proceso de independencia, el ejército se refugió bajo su protección proclamándola su Patrona.

De esta manera, cuando el 14 de Marzo de 1818, ante el avance de los ejércitos españoles, la independencia de Chile peligraba, las autoridades civiles y religiosas acudieron a la Catedral para pedir la intercesión de la Virgen del Carmen, y juraron construir un Templo en su memoria, en el lugar donde se obtuviera para siempre, la libertad de nuestro país.

El 15 de noviembre de ese mismo año, se colocó y bendijo la primera piedra de la Capilla de la Victoria o Iglesia Votiva de Maipú. Posteriormente y después de 64 años de intermitente construcción por falta de recursos, se inaugura solemnemente la antigua Iglesia. Pero, en 1906 un violento terremoto y posteriormente un temblor hicieron necesaria la reconstrucción del templo. El 8 de diciembre de 1942, el congreso mariano que se celebró en Santiago, tomó como único acuerdo de esta reunión construir un grandioso santuario en Maipú, en los terrenos de la antigua Capilla de la Victoria para honrar a la Virgen del Carmen.

Es así como el 16 de julio de 1948 el Arzobispo de Santiago, y después Cardenal, Monseñor José María Caro mandó iniciar la construcción del nuevo santuario.

En este video, el padre Carlos Cox nos habla sobre la estrecha relación del movimiento con el Santuario Votivo de Maipú, y cómo desde que los Sacerdotes de Schoenstatt lo asumieron, se trabajó para ... se trabajó para promover una piedad mariana que se insertara en la vida y en la Fe de todo el pueblo chileno.

Los invitamos a ver este testimonio.