"UN HIJO DE MARÍA" una memoria al P. Tiago Frescata- Por Carolina Elizabeth Rojas Cerda
Carolina Elizabeth Rojas Cerda es Ingeniera Forestal, Coordinadora de la Familia del Santuario Nuevo Belén para la Iglesia, en Santiago de Chile y miembro de Liga Apostólica Femenina. Con participaciones en la Juventud y Universitarias, siempre ha sido agente activo del Movimiento, donde en su paso por la Parroquia Nuestra Sra. de los Dolores coincidió con el P. Tiago Frescata, Sacerdote Schoenstattiano Fallecido durante los últimos días. Te invitamos a leer una simple memoria sobre su vida sacerdotal.
Sábado 9 de enero de 2021 | Carolina Elizabeth Rojas CerdaHablar del P. Tiago es hablar de una persona cercana, que siempre veía lo mejor de las personas y sonreía antes situaciones complejas. Su paso y estadías siempre estuvieron llena de vínculos, como buen portugués en su amabilidad mantuvo hasta el final varios de ellos. Llegando donde fuera con su manera sencilla y sonrisa fácil.
Sacerdote calmado, que escuchaba, meditaba y respondía, al salir de su oficina uno sentía que Dios le había hablado directo y que siempre se podía volver a empezar. Un encuentro constante con el Dios misericordioso, donde cada vez uno sentía que podía ser mejor persona.
Atento a la vida, realizó sutiles cambios que permitían ir viviendo nuestra fe de manera más acorde a los tiempos. Incluso, en su paso por Carrascal, implantó con chicos de confirmación unas mini misiones invitando a jóvenes a esperar la Navidad de una manera diferente, algo que se realiza hasta el día de hoy.
Siempre ocupado especialmente de hermosear los espacios, poniendo el toque “portugués” de alguna u otra forma y viendo en ello el crear hogar. Preocupado de dar dignidad a cada espacio; telas, velas y otros, en lo simple siempre era posible crear comunidad y acercar en la belleza al Padre.
Pastor que caminaba confiado en el amor de Dios y como podía, conducirnos a su corazón. Donde muchas veces los caminos no fueron simples, pero siempre se mantuvo firme anclado en la misión encomendada, ayudando para que otros también pudieran ayudar y servir.
Formador de equipos, haciendo jugar cada don y en esto crecer, dando la confianza para expresar diferencias y llegar a puntos de acuerdo, valorando la riqueza de cada uno. Un pastor.
Con una gran memoria nunca olvidaba las fechas significativas, era muy esperable un llamado o un mensaje suyo para saludar por un cumpleaños o por algún acontecimiento especial. Era tan preocupado de lo importante que era para la otra persona, que un feliz aniversario de Alianza llegaba el día que correspondía.
Preocupado de que el otro se sintiera bien, generoso, de corazón amplio, acogedor y buena persona. Ponía sus dones al servicio de la comunidad. Fue así como viví y vivimos el paso de un gran sacerdote, que desde lo humano supo como conectar al resto a lo divino.
Traspasado por el amor de Dios, siempre personal, dedicando tiempo en conocer a las personas, con suavidad para ir acompañando el camino y siempre apuntar a lo alto, caminatas conversadas en que más de una vez la vida se enrielaba.
La alegría de la amistad; aprender que los vínculos deben ser cuidados y tratados con afecto, la lejanía no es motivo para no caminar juntos por la vida, no es acaso la Alianza de Amor que nos lleva a entender que ya nunca vamos solos y eso fue fácil de aprender con él.
Incluso en la lejanía de los kilómetros supo hacer que la distancia y el mar se volviera pequeño para estar presente, la oración ofrecida por cada uno era tan firme que se sentía sobre todo en los momentos más difíciles. Así es como el pastor que siempre ofreció su oración por la vida y los proyectos de otros recibía de vuelta la oración de tantos que vieron en él un ejemplo, hoy vuelvo a rezar para que el encuentro con Dios tomado de la mano de nuestra Mater sea el más lindo que puede tener una persona que paso por nuestras vidas haciendo tanto bien.
En nuestras memorias, P. Tiago Frescata Sobrinho de Oliveira. 22 de diciembre de 1971 – 7 de enero de 2021.
Por Carolina Elizabeth Rojas Cerda