Campamentos Invierno Juventud
Hna. Emilia Hernández
Bajo el lema “¡Reina Unidas, somos tu victoria!”, del 13 al 15 de junio, en el Santuario del Valle de María de Buin, se llevó a cabo el Campamento de Portadoras de la Reina 2025 de la zona central. En ella participaron 45 niñas entre 10 y 13 años, provenientes de Curicó, San Fernando, Buin, Colina, Monte Schoenstatt, Viña del Mar y Bellavista.
Las Portadoras de la Reina tienen como objetivo poder acompañar estos años de transición hacia la adolescencia a través del AVE: el amor a lo que soy, la veracidad y el ennoblecimiento a los demás; valores que le entregan herramientas concretas para enfrentar los desafíos personales de esta etapa. Cada año, en los campamentos se busca profundizar una de estas áreas, a través de juegos y el compartir comunitario. En esta oportunidad, como una respuesta a los desafíos que muchas niñas viven en los colegios en el tema de convivencia y el trato con otros, se trabajó en el ennoblecimiento. Para este fin, el campamento se planteó como las “Olimpiadas de la Mater”. ¿Cómo ganábamos estas Olimpiadas? Con la ayuda de María y todas juntas. ¿Cuál era el premio? Poder ser buenas amigas con las demás. Para ello cada una recibió su polera del “equipo de la Mater” y nos entrenamos con el “handball del buen trato”, el “bowlling de la sinceridad”, “las cheerliders para sacar lo mejor del otro” y “la posta para rezar por mi amiga”. En la vivencia de la noche, cada una recibió una medalla, como signo de que es María quien triunfa en cada una, sin importar que caigamos o que nos cueste, celebrando después todas juntas este hito en la cena festiva.
P. Juan Pablo Cruz y Pablo Vidal
El 20 y 21 de junio, el Santuario Valle de María (Buin) reunió a cerca de treinta Cruzados —niños de 4º a 7º básico— provenientes de Bellavista, Puente Alto, Rancagua y Buin. Entre risas, oración y juegos, descubrieron que la fe puede vivirse con alegría, creatividad y profundidad.
La “Ley de los Cruzados” que marcó el encuentro —“Amo a María como una madre, sirvo a María como una reina”— se unió al Evangelio donde Jesús, desde la cruz, nos entrega a su Madre: “Ahí tienes a tu madre”. Con ese horizonte, la actividad central fue “Construye tu propia imagen de María”: cada niño elaboró una imagen con los colores de la bandera de los Cruzados, signo de pertenencia y de Santuario. Más que una manualidad, fue un gesto de acogida a la Virgen en la vida cotidiana; muchos la ubicaron en su Santuario Hogar o en la pieza, y aun quienes no son católicos valoraron su mensaje de amor y protección.
Hubo competencias y desafíos ingeniosos —como crear una presentación que mezclara un personaje bíblico, un superhéroe y una canción— con la Copa José Engling en disputa. Pero lo que quedó fue la experiencia de comunidad y el convencimiento de que tienen una Madre y Reina que los guía.
Todo fue posible gracias al servicio de familias y consagrados, y al liderazgo del P. Juan Pablo Cruz junto a los seminaristas Bernardo (Portugal), Francisco (Argentina), Paul (Nigeria) y Julián (Estados Unidos). Con el corazón lleno y nuevas amistades, los Cruzados ya miran a la misión de verano, bajo la guía de la Mater.
julio 2025
